Educared nació el 24 de abril del 2002. Me correspondió ser parte de una ceremonia realizada en el auditorio del local de Av. Arequipa con presencia del entonces Ministro de Educación, Nicolás Lynch, y del Presidente de Telefónica del Perú, Alfonso Bustamante. A través de una video conferencia se unieron a esta ceremonia diez ciudades del país: Arequipa, Cusco, Trujillo, Chiclayo, Chimbote, Huancayo, Ica, Iquitos, Piura y Tacna.

Perú era la quinta nación en donde la Fundación Telefónica iniciaba un programa dirigido a democratizar el uso de las tecnologías en favor de la escuela pública, en especial la más necesitada. Antes lo había hecho en España, Argentina, México y Brasil. Con el personal de las Fundaciones de esos países se produjo un rico intercambio de experiencias, en reuniones organizadas en diversos países, lo que también se enriqueció con la presencia en muchos de esos eventos de personalidades como Ken Robinson, Richard Gerver, Sugata Mitra…

En Perú se empezó con un equipo pequeño, liderado por Rafael Varón y Lillian Moore a los que se sumó Gina Rota. Quienes nos encargamos de las tareas iniciales de alimentación del portal que se creaba fuimos: Tita, Maritza, Hildebrando Luque  quien escribe.

¿Qué era Educared al principio?

Surgió como el primer portal de educación en el país.  Su desarrollo lo ha convertido en la iniciativa privada más larga y sostenida. Tres características distinguían a Educared en ese entonces:

• Inicialmente fue un gran repositorio de contenidos. Eran un conjunto de materiales bibliográficos, en su mayoría producidos por el equipo encargado del Portal orientados a apoyar a directivos y profesores en su actualización y mejora de sus prácticas pedagógicas. Los estudiantes accedían a recursos que les facilitaban aprender y los padres de familia orientaciones sobre crianza y educación de sus hijos.
• Un objetivo era convertirse en un foro de comunicación, intercambio de experiencias y canalización de sugerencias a favor de la educación nacional e iberoamericana.
• Buscó llegar a la comunidad educativa no solo a través de la web. Las actividades presenciales de difusión de la existencia del portal y de capacitación jugaron un papel muy importante desde sus inicios. Se facilitó la relación con las Direcciones Regionales de Educación y las Unidades de Gestión Educativa Local, con quienes se trabaja muy de cerca, al igual que con el Minedu. Son nuestros grandes aliados, al igual que instituciones como Fe y Alegría, Unesco en el Perú, Grade, la Pontificia Universidad Católica del Perú, muchos hospitales públicos que atienden niños, por citar algunas de ellas.

¿Cómo se produjo su evolución de la Comunidad Educared?

Ser a la vez un proyecto local y global favoreció el intercambio de experiencias entre los equipos de profesionales de las Fundaciones que operan en Iberoamérica. Cada una empezó a encontrar su propia personalidad en el marco de líneas estratégicas comunes para todas.

Aprovechar ese espacio de iniciativa y creatividad fue para el equipo Educared en el Perú la oportunidad para ser uno de los equipos referentes de lo que se hace en Iberoamérica.  

La estrategia principal fue seguir de cerca el desarrollo tecnológico y su aplicación en la educación.  De la web 1.0, que hubo al principio, se avanzó a la web 2.0 y ahora hasta la web 4.0, la inteligencia artificial, la realidad aumentada, la velocidad 5.0. Estos avances tecnológicos abrieron toda una posibilidad de renovación del portal y de los recursos que se ofrecían. Ellos pasaron a ser más interactivos, audiovisuales, de opciones múltiples para enseñar y aprender, atractivos, de logro de mejores resultados; más participativos, con posibilidades de trabajo en equipo, de multiplicar las herramientas utilizadas. La comunidad empezó a tener otras plataformas de acceso, pues ahora no solo es el Portal Educared; también se cuenta con Aula Digital en Casa, Oráculo Matemágico y Ebro que han sido fundamentales en el apoyo a docentes, estudiantes y padres de familia en el proceso de educación a distancia que se empezó con el desarrollo de la pandemia originada por la COVID-19, la que también obligó a multiplicar las oportunidades de capacitación.

Todos estos desarrollos nos han permitido fortalecer la Comunidad Educared que ahora aprovecha igualmente las nuevas herramientas de comunicación como el Twitter, el Facebook y las herramientas grupales como el Teams, el Zoom y el WhatsApp.

Uno de los pasos más trascendentes y que fortaleció el sentido de comunidad fue ejecutar proyectos de desarrollo digital en las escuelas. Al principio, ayudando a sacar provecho a la fuerte inversión en equipamiento que el Estado había hecho en tabletas en el marco del programa Una computadora por Niño. Fue un intenso esfuerzo de poner en uso un equipamiento que carecía de muchas fortalezas: no contaban con suficientes recursos para el aprendizaje, no había una estrategia que promoviera su empleo, en especial porque la capacitación a los profesores había sido insuficiente; tampoco era fácil cargar las baterías de alimentación para que el equipamiento esté disponible en la clase siguiente. La Fundación ayudo a superar estas dificultades.

Un segundo paso en la ejecución de proyectos fue la ejecución del programa Aulas Fundación Telefónica. Esta vez la Fundación ejecutaba una iniciativa integral que comprendía acompañamiento, capacitación, equipamiento, soporte de plataforma con recursos educativos para el trabajo en on line o en off line, en caso de no existir conectividad. En cuanto al equipamiento donado por la Fundación Telefónica, se trataba de un equipo con 40 tabletas, un servidor con todos los recursos que podrían utilizarse en una sesión de clases, un cargador para la alimentación simultánea de todas las tablets, ademas de capacitación y acompañamiento. Para las áreas rurales se estableció una valiosa alianza con Fe y Alegría.

Como se recuerda, la Comunidad Educared nació para favorecer a la escuela pública, en especial la que atiende a los sectores más vulnerables. Pero por algunas circunstancias, no todos los niños tienen a veces la oportunidad de seguir con regularidad sus estudios en la educación básica. Es por ello que no se descuidó la atención de dos tipos de población: la que asiste a los centros de educación especial y la que está obligada a pasar un tiempo, a veces muy largo y debido a penosas enfermedades, en los hospitales. Para estos últimos se creó el programa Aulas Hospitalarias. Ha sido un programa pionero en el Perú, cuya experiencia fue determinante en la aprobación de una ley que da derecho a los niños internados en hospitales a seguir aprendiendo.   

Recientemente, y a pesar de las dificultades generadas por la pandemia, la Fundación inició un programa dirigido a atender a la población joven y adulta que asiste a las escuelas de educación básica alternativa. Mejorar los servicios que reciben es indispensable e impostergable si se tiene en cuenta los problemas de productividad que tiene la población con solo educación básica, sea incompleta o completa; además que el sistema debe tender a ofrecer educación a lo largo de la vida que permita a los peruanos ir adaptándose constantemente a los cambios sociales y del conocimiento.

Una nueva etapa llegó con el Programa Educación Digital, integrante de un programa mayor denominado en Iberoamérica y el mundo: Comprometidos con la Educación. El equipamiento que antes era fijo se convirtió en móvil, no requiriéndose de un ambiente especial para trabajar con él, sino que se lo podía llevar a cada aula. La plataforma y los recursos se potenciaron y se consolidó un modelo de gestión muy exitoso que lo llevó a tener múltiples reconocimientos, tanto en el país como en el exterior. El último, el Premio Wise de la Fundación Qatar, en el año 2021, al considerarse como una de las seis iniciativas más relevantes entre las tres mil concursantes de ciento diecinueve países.   

Asimismo, y convencidos que el cambio no para, se han abierto espacios para reflexiones amplias sobre el futuro de la educación y la tecnología. Uno de ellos fue un conversatorio especializado denominado Mayéutica. Otra manera de hacerlo ha sido mediante concursos de buenas prácticas y estímulos a la innovación que se orientan a despertar la iniciativa y creatividad de miles de profesores y estudiantes.

¿Qué es la Comunidad Educared actualmente?

En el largo camino de casi veinte años la comunidad Educared se ha fortalecido. Las estadísticas que se muestran a continuación son de lo más ilustrativas. Cuando en el 2002 se creó el portal Educared se comenzó con 34 mil suscriptores; en el 2005 habían aumentado a 344 mil y las páginas consultadas superaban las 2 460 000. El 2020 las visitas al portal sobrepasaron las tres millones y se cuenta con setenta mil usuarios activos. Además, surgieron otros canales de comunicación a través de herramientas como el Twitter y el WhatsApp.

Trabajar directamente con las escuelas, abrirse a ofertas de formación que no solo beneficiaban a las escuelas del programa, así como tratar de acompañar de cerca los avances en la tecnología y la educación permitió abrirse otros desafíos. Por ejemplo, han nacido en el interior de la Comunidad Educared otras especializadas en campos como Educación Mediática, Ser docente en Red, Docentes Destacados, Oráculo Matemágico, Gestión y Liderazgo Directivo.

El desafío inmediato es contribuir a la concepción de una educación híbrida que usando las tecnologías lleve a que la población de las escuelas públicas reciba una educación de mayor calidad. El de mediano plazo será consolidar la escuela del futuro post-pandemia.

Una de las fortalezas de la Comunidad Educared es contar con una organización que siempre trata de mantenerse joven. A lo largo de los veinte años los equipos profesionales fueron fortaleciendo y perfeccionando sus visiones de desarrollo de una política de inserción de las tecnologías que más convenga a las distintas realidades del país. Continuidad de un esfuerzo, a la vez que cambios oportunos basados en evidencias y adaptados a los contextos nacionales es lo que es una de las estrategias principales de la gestión del Programa.