El autor señala brevemente las tendencias mundiales respecto a la educación en la que se señala que frente al avance tecnológico y desarrollo del conocimiento, el 80% de lo aprendido tendrá que ser reaprendido, desechado o repensado. Para enfrentar este desafío desarrolla las actitudes de los Estados más desarrollados para enfrentar esta situación como son el mejoramiento de la eficacia de los sistemas educativos, una educación sustentada en valores como la tolerancia, solidaridad, la participación son claves y la inversión en educación.